Hola amigas, lo primero pedir perdón por no poder responder a vuestros comentarios, e incluso no poder comentar en otros blogs, es un problema de estamos padeciendo hace meses los usuarios de Bloguer y que parece que no tiene solución de momento, que sepáis que leo todos los comentarios de las pocas personas que pueden hacerlos.
Mil gracias por vuestros elogios y como digo siempre, las críticas son bienvenidas porque enseñan a mirar los propios trabajos desde otra optícas y a mejorarlos, así que no os cortéis al hacerlas.
Hoy os traigo un trabajito que he hecho casi sin querer, por aprovechar algún resto de hilo de la canastilla de Claudia y algún retalito de tela que me gusta especialmente.
Es un cuerpo con punto de "ochitos" uno de los puntos aprendidos durante la infancia y adolescencia y que se quedan a reposar en la memoria durante toda la vida.
El material empleado es un hilo de perlé del nº 8 de Anchor, con un puntito perlado, es el típico perlé de labores para bebé de toda la vida.
Está rematado con un piquillo de ganchillo a conchitas, también un clásico en el mundo del crochet.
La espalda es sumamente sencilla, solo dos orillos en punto bobo para el abotonado.
Los botones también son reciclados de otra prenda ya desechada.
Lo he adornado con una sencillisima flor de ganchillo en la parte del tallo, como simiente he hecho servir un botón blanco nacarado.
La falda es de un algodón de pachword, muy fresco y finito, también sobrante de una labor de hace años.
No pretendía hacer un vestido ni siquiera de salir, solo algo fresquito para estar por casa, la piscina o la playa, pero la verdad es que el resultado me encanta, con unos zapatitos de loneta rosa del mismo tono que tiene, creo que mi niña estará para comérsela, jejjejejjejejej
Espero que os haya gustado mi última idea antes de las vacaciones, yo he quedado muy satisfecha.
Felices vacaciones a todas